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sábado, 21 de enero de 2012

La Difunta



 Que odiosa fue la vida con ella, que seca y gris quedó al final. Fueron muchos los procesos, la intentaron revivir, pero no. No lo soportó.
Sus familiares la observaron mientras caía al suelo, ninguno pudo hacer nada. – esos ácidos –  “decían” –esos malditos ácidos la quemaron y acabaron con ella.
Desde arriba la observan, es como si cayera desde un precipicio hacia su fin, que lenta y dolorosa muerte.
Allí quedó. Gris, sin vida, tan lánguida y desnutrida.
La hermosura que brilló y alguna vez fue tan halagada hoy no es más que una hebra muerta y olvidada. 

Ámame




Quiero repetir el momento una y otra vez, escuchar en el silencio tu voz de artista y dejarme guiar por tu poesía cursi. Tus versos son las caricias, cada estrofa es infinita, elevando mis deseos, haciéndome sentir viva. Ámame sin pensarlo, con palabras, sin tocarnos, sin ni siquiera mirarnos. Esa es tu esencia, lo que hace que te ame, sin buscarlo, sin ni siquiera imaginarlo.

Reflejos de mi Alma


Por un momento pensé que mi sonrisa fingida arreglaría todo. Fue tu mirada sincera la que me dijo que no, que fingir no bastaría, que desafiarme a mi misma sería lo mejor. Entonces renací en mi verdadero yo. Descubrí en una lágrima resbalando en tu mejilla la transparencia de mi alma y me gustó lo que reflejaba. Desde ese momento decidí seguir el rocío que dejaba esa gota mostrándome el camino.

Esperar



Que me queda sino esperar…


Esperar a que la firma de lo eterno sea este beso.


Esperar a que la lluvia ahogue mi llanto.


Esperar a que el largo silencio logre vencer al olvido.

Que me queda sino esperar…


Esperar a que un suspiro te haga mío. 


Esperar a que el destino pierda el sentido.


Esperar a que en el tiempo veas mis ojos y decidas regresar.




Tu mano en la mía y me sentí atrapada..
 desde entonces no he querido escapar.


Cada gota de tu silencio
 me grita hasta perforar mi piel
 y quemar con su humedad mi alma

Desasosiego




Inquieta, en fuego voraz me quemo muy lento


Inquieta, aprieto los besos y muerdo tu aliento

Inquieta, rebusco en tus piegles y abrazo el aroma 

Inquieta, olvidando ayer y viviendo ahora

Inquieta, sostengo el calor y me amarro al frío

Inquieta, vuelo desde alto y caigo al abismo

viernes, 20 de enero de 2012

A quien es y nunca dejará de ser



Abrí las alas de mi alma y las coloreaste con miradas, provocando ahuyentar todos mis miedos. Con tu aliento dibujaste mil caricias en mi cuello, despertaste la esperanza con tus sueños. 
Mis labios dejaron de ser desiertos, tras lloviznarse en tus besos venideros. Fuiste el cielo, fuiste el sol, y hasta luna en mi inocencia, conquistando mi pureza.
Fuimos dos, somos uno. Fuiste cura en mis dolencias. Fuiste melodía en mi muda oscuridad. Héroe, acompañante, calma en mi mar cuando  embravecido está.
 Eres quien fuiste y nunca dejarás de ser. Quien vela mi tormento y lo hace desaparecer.

Seca por Dentro


Tomé una botella, la rompí y de la misma forma que el día anterior la enterré en la espalda de Damián, lo hice igual en mis muñecas. El filo del vidrio iba rompiendo mis tejidos y cada punzada se encargaba de inhalar aquella escena.  
Las palabras antes dichas invadían mi mente ahogándola sin piedad, sentía que lo estaba viviendo justo en ese instante, la conversación tormentosa era gritada a través de las paredes, debajo de la cama, escuchaba que cada objeto del cuarto me susurraba:

-¿Darling qué quieres? –me dijo al entrar al taller. 
-Yo vine a… -una pausa larga hasta que por fin me atreví. -Vine a proponerte algo, se que hemos hablado de esto pero yo te quiero, te necesito cerca, quisiera que me entendieras. Solo tengo 15 años.
-Eso no tiene nada que ver, si en verdad sintieras algo por mí, dejarías de hacerte la monja.
-No es eso Damián, sabes que le hice una promesa a mi madre.
-¿Una promesa?  Y crees que esa promesa te dará lo que yo puedo darte, no me hagas perder el tiempo.-dejó vacía la última botella de licor barato y se alejó de ella.
-Pero… mi madre era lo único que tenía, con mi padre no puedo contar, tu eres todo lo que tengo. Intenta comprenderme, soy muy infeliz. 
-Bueno no vayas a llorar.-se acercó y me miró como si mis pechos le rogaran colgarse de ellos. -¿Qué es lo que viniste a proponerme?
-Quiero que ahorremos, yo voy a buscar trabajo y pronto podríamos vivir juntos.-le dije con emoción. 
-Ja ja ja –me miró de pies a cabeza.- No puedo hacer eso, pero aun así te haré muy feliz Darling. -¿Y cómo?- le dije sonriendo. 
-Acércate,  dame un abrazo y te lo diré. 

Fue hace unas 10 horas que me ocurrió aquello. Llegué a casa desecha. Mi viejo borracho como siempre no hacía más que dormitar en el sofá frente a un televisor que solo presentaba rayas grises. Entré corriendo y subí al cuarto. Me tiré al suelo con las manos en la cara, el mar que habitaba en mis ojos empapó las rodillas, sin sostén y con la ropa rasgada, todos esos recuerdos me dominaban: las manos sudorientas que golpearon mi cara, recordé el olor que alguna vez me parecía agradable y ahora me repugnaba, mis piernas entreabiertas y la dignidad encerrada, una humedad incontrolable y los sonidos indelebles que producía cada movimiento.

Al terminar,  me miró asquerosamente y se dio vuelta. Intentó decir una frase que murió por el crujir del vidrio roto antes de ser completada.

Ahora siento punzadas tenues libres de dolor, pero cargadas de alivio, no visualizo el líquido rojo que me torturó el día anterior. El mar se asoma, una presión en el pecho, el descontrol otra vez. Me toco las mejillas y la humedad no está, miro mis muñecas y no sangro. Elevo la mirada para ver la luz del amanecer reflejada en la ventana y finalmente grito -Me he secado por dentro.

Te Amo


Te amo porque el abismo que provocas en mi estomago me obliga
y  tus besos amenazan con suicidio, Y si en el intento cumplieran con la amenaza,
serán mis labios los que en la soledad perezcan. 

Desilusión



El sonido de las pisadas cada vez mas débiles y asesinado por el portazo, se hizo uno solo con el sonido de las últimas gotas que caían al piso. Permanece de pie el cuerpo inerte, portador de un corazón fosilizado.  

Amiga Libertad


La busqué en un beso desquiciado
en miradas perdidas del camino
en el quiebre de tantos otoños pisoteados,
que testigos fieles de mis líneas siempre han sido

La busco en el roce de una flor
en el llanto de mis sueños rotos
en la incansable sonrisa del viento,
que me impulsa y borra la puerta del pasado

¿Acaso la buscaré algún día en mis pensamientos,
en mis adentros predecibles para otros
desconocidos e inciertos para mí?
Sé que está hundida, en lo profundo, pero ahí está.



Vínculos Imborrables



Aleteo de mariposas en todo el cuerpo
Caricias de suspiros que me erizan la piel
Y un baile en la mirada imposible de borrar.

Tus tenues pasos son melodía a mis oídos
Mientras tu silencio interpreta mis secretos
Me buscas y me das calor con tus pensamientos

Tu ausencia, centinela de mis sueños
Mi búsqueda, aliento que me da vida
Nuestro encuentro, vapor que nos alimenta.

Esperanza


Hasta en el instante más amargo...
donde la tierra cubre tus ojos y crees no ver nada,
donde una montaña te aplasta la espalda y un desierto se adueña del mar que limpiaba tu alma....siempre, a pesar de eso y más, siempre hay una esperanza.

Confesión



Es tan oscuro que ahoga el iris y envuelve la miel 
hasta cambiar su sabor. 
Me busca siempre como si me odiara,
 como si me amara se aferra a mí. Hay días que llega sin sospecharlo,
 no toca puertas, solo saluda arruinando la forma de esos labios, 
esos que antes del entierro del último suspiro adornaban pantanos y cantaban dulzura.
” Fuera de mi” alcanzo a decir, mientras que retuerce lo que en verdad soy, 
no sé lo que busca, lo que intenta hacer, pero arruina cada vínculo, cada instante, cada esencia.
 Suele alejarse y logro vencer, vuelvo a ser yo misma o quizás a no ser.